El cáncer de pulmón se produce cuando se forman células malignas en el tejido pulmonar. Entre los factores de riesgo encontramos: tabaquismo, exposición de arsénico en el agua potable, algunos factores hereditarios, entre otros. Es una patología difícil de pesquisar, por lo que es importante prevenir.
MITO
Una persona tratada por cáncer de pulmón no debería realizar ejercicio físico aeróbico nunca más, porque tiene menos capacidad y podría ser peligroso.
REALIDAD
Una persona tratada por cáncer de pulmón puede realizar todo tipo de ejercicio físico mientras sea indicado por un profesional con formación en oncología (cáncer).
MITO
Una tos muy fuerte o prolongada puede perjudicar a una persona tratada por cáncer de pulmón, deben toser suave y lo menos posible.
REALIDAD
La tos es un mecanismo que protege a los pulmones y vías respiratorias de infecciones o agentes extraños, por lo tanto, una persona tratada por cáncer de pulmón puede toser y realizar ejercicios respiratorios.
MITO
Una persona tratada por cáncer de pulmón tendrá que usar oxígeno para respirar durante toda su vida y por eso no podrá realizar ejercicio físico.
REALIDAD
El uso de oxígeno dependerá de la condición de salud de cada persona, sin embargo, una persona que usa oxígeno puede realizar actividad física mientras este supervisado por un profesional.
MITO
Las personas que se traten por cáncer de pulmón tendrán que usar traqueostomía y ventilación mecánica, por eso nunca podrán recuperar su condición física.
REALIDAD
El uso de traqueostomía y ventilación mecánica dependerá de la condición de cada paciente, sin embargo, esto no es impedimento para realizar rehabilitación con un terapeuta físico.
Vídeos de interés
Introducción al linfedema secundario
por tratamiento de cáncer
Ejercicio de drenaje linfático de miembro superior (Nivel fácil)